Batido de coco y limón

Nada más fácil para refrescarse que este batido a base de limón y leche de coco. Así de simple!!!

He visto esta misma tarde la receta en el Instagram de directoalpaladar con el nombre de "limonada de coco" e inmediatamente e ido a prepararlo.

La leche de coco lo suaviza mucho, puedes poner más o menos limón, más o menos azúcar según tus gustos. Yo lo he hecho exactamente así:

Ingredientes

• una lata de leche de coco ( 400 ml.)
• 6 cubitos de hielo ( unos 170 gr) + un hielo para cada vaso
• medio litro de agua muy fría
• zumo ( unos 50 gr)  y ralladura de 1 limón 
• 3 cucharadas de azúcar ( unos 40-45 gr)

• coco rallado y leche para hacer el borde del vaso

Elaboración

  1. Batimos la ralladura de limón ( sólo lo amarillo) con los hielos, leche de coco, agua y azúcar algo más de un minuto.

  2. Decoración (opcional):  Introducimos el borde del vaso en un dedo de leche. Dejamos boca abajo unos segundos, sin apoyar,  para que suelte el exceso de líquido. Introducimos en coco rallado. 

  3. Añadimos un hielo a cada vaso y servimos.

                                           A mí me encantan estos refrescos!!!!!!!

Te invito a que mires también este batido de yogur, nata y limón, llevo haciéndolo "toda la vida" y nos encanta!!!

 

Pastel fácil de calabacín

Ya teníamos un pastel de calabacín publicado. 

Lo bueno del que traigo hoy es que no necesita pre-cocinarse ningún ingrediente. Todo triturado, a modo de flan, y el calabacín crudo en rodajas para que se cocine al calor del horno. 

La receta es de la revista ¡Hola! cocina. 

Es un pastel muy suave. Si te gusta más potente puedes añadir alguna salsa para servirlo tipo salsa de tomate, salsa mayonesa...

Ingredientes

• 3 huevos
• 300 gr de leche entera
• 2 calabacines medianos
• la ralladura de un limón
• 75 gr de queso parmesano
• 50 gr de harina
• 75 gr de mantequilla
• 30 gr de almendra molida
• menta picada
• sal

Elaboración

  1. Untamos paredes y fondo de una cazuela de horno. Espolvoreamos con un poco del queso rallado.

  2. Mezclamos la mantequilla restante, en pomada para que se integre mejor, con la leche, los huevos y un poco de sal.

  3. Por otro lado, mezclamos la harina tamizada, ralladura de limón ( sólo la parte amarilla), almendra molida, pizca de sal, menta picada y el resto de queso rallado. 

  4. Hacemos un hueco en el centro y vertemos, poco a poco, la mezcla líquida. Vamos integrando hasta que quede homogéneo. 

  5. Cortamos los calabacines en rodajas finas pero no transparentes. 

  6. Alternamos capas de rodajas de calabacín superpuestas con batido hasta acabar con el batido. 

  7. Introducimos en el horno que estará precalentado a 190ºC. Horneamos hasta que al pinchar con una aguja, esta salga limpia y los bordes queden dorados. En mi caso unos 30 minutos. 

  8. Dejar enfriar un poco antes de servir. 

                                                                           Suave y sanita. Una forma de comer más verduras!!!

 Ensalada refrescante de pepino

No sé cómo llamar a este plato: sopa, ensalada, agua... de pepino.

Hoy, al llegar a casa, venía sin hambre y con mucha calor y he recordado aquel pepino en agua que nos ponía mi madre cuando yo era muy pequeña, que a mí no me gustaba especialmente, la verdad, nunca he sido mucho de pepino; pero veía cómo los mayores se lo "bebían" con delirio para terminar las comidas veraniegas.

He buscado, porque me parecía que era muy simple, agua, pepino y aliño de ensalada, pero quería saber si alguien aún hacía este plato en algún lugar de España. Y sí, resulta que por Andalucía y Murcia se hace aún este plato y se toma como entrante o, como mis padres, para terminar una comida en días de mucho calor en los que apetece menos comer que beber.

No recuerdo si mi madre ponía orégano. Yo lo he visto en la receta y le da su toque. Es importante que se sirva realmente frío por lo que se hace antes de comer y se le añade algún hielo que se vaya derritiendo para que, al servirlo, el agua esté helada. 

Ingredientes

• 1 pepino 
• sal
• orégano
• 1 cucharada de vinagre de jerez
• 3 cucharadas de aceite de oliva v.e
• agua muy fría
• hielo

Elaboración

  1. Pelamos y cortamos el pepino en daditos mini. Aliñamos con la sal, orégano, vinagre y aceite. Removemos y añadimos agua suficiente para cubrir el pepino. Si añades más agua, tendrás que aliñar más generosamente.

  2. Ponemos algún cubito de hielo y reservamos en la nevera hasta el momento de servir. No conviene dejarlo de una comida para otra porque el pepino tiene que estar crujiente.

  3. Servimos antes o después de la comida, para refrescar!!!!!

                                                  No es un gran plato pero me recuerda la niñez y refresca un montón!!!!!