lunes, 19 de octubre de 2020

Gachas manchegas

 


Gachas manchegas


  Este fin de semana ha sido excepcional. Por fin, después de 40 años de mucho más que amistad, hemos visitado el pueblo de mi amiga y comadre Julita, Valdeolivas.

Valdeolivas es un municipio de la provincia de Cuenca, en la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Perteneciente a la comarca natural de La Alcarria.
Tiene un área de 46,05 km² con una población de 202 habitantes (Instituto Nacional de Estadística 2019) y una densidad de 4,65 hab/km².


Tradicional tierra de olivos, a la que debe su topónimo, Valdeolivas se asoma al barranco de la Dehesa en la Comarca de la Alcarria. 

La vista desde mi ventana




El Charcol , antiguamente lavadero

La iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación. 

El 15 de enero de 1982 fue declarada monumento histórico-artístico. En la actualidad está considerada Bien de Interés Cultural.




La Plaza Nueva



La Plaza Vieja

La ermita, en el mirador de San Quilez, con la imagen en su interior de Santa Julita y San Quirico, patronos de Valdeolivas. Abogados de los pobres, de los aserradores y de los niños.






Valdeolivas conserva tres magníficos molinos de viento situados en la Eras Bajas. Su estructura cilíndrica tradicional con la última fila en sillares redondeados para facilitar el giro del tejado y sus aspas. Han perdido la techumbre y la maquinaria interior. 

Aceite de La Alcarria: 
Aceite muy compensado y estable debido a la relación entre los ácidos grasos insaturados y saturados.
Alto contenido en ácido oleico.
El color predominante es verde limón, más o menos intenso, dependiendo del momento de la recolección y del grado de madurez de la aceituna. La proporción entre el contenido en carotenos y clorofila definen la tonalidad característica de los aceites de esta Denominación de Origen.
Desde el punto de vista organoléptico los aceites de esta variedad castellana (verdeja) son frutados y aromáticos, rotundos en su olor a hoja, en los que se entremezclan sabores a hierba, avellana o plátano, a veces con sabor picante en boca.


----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------


Las Gachas


  Mi amiga Julita, cuyo padre nació en Valdeolivas y madre en Albendea, a 4´5 Km de Valdeolivas; tiene primos y primas en ambos pueblos. Tanto es así que el cura de Valdeolivas es su primo, el alcalde de Albendea es su primo y sin embargo, la prima Julita que yo conocí casi al mismo tiempo que a Julita ahora resulta que en verdad no es prima!!! Qué lío!!!
La prima que en este caso nos interesa, la protagonista de nuestras gachas, es la prima Mariví que es la que nos ha cocinado todo este fin de semana. 
La prima Mariví vive en Albendea con su marido Rafa, el juez de paz del pueblo, a la vez que bombero, ambos ( por cierto también primos entre ellos) tiene dos hijos: Lorena que vive con ellos y Juanjo que ya emigró a Madrid para trabajar en Inditex...


A Mariví la vemos en el centro, en primer plano. Ya me habían dicho que nos haría unas gachas, lo que no me habían dicho es que nos haría toooodas las comidas. No voy a decir que no he visto a nadie más hospitalario porque yo tuve una madre que se llevaba la palma!!!! Digamos que Mariví ha igualado a mi madre.



Me hubiera gustado ver cómo preparó las gachas desde el minuto uno pero no me fue posible porque como buena anfitriona se puso temprano a prepararlo todo para que cuando llegáramos estuviera todo a punto.
Lo que sí me hizo Mariví fue el favor de ir haciendo fotos conforme iba preparándolo todo. Así que esta entrada es completamente de nuestra prima Mariví.


Las gachas manchegas es un plato español, de la región de La Mancha, aunque en otras regiones de España se dan otras variantes.
Consiste en una especie de papilla, elaborada con harina de almortas, a la que se añade panceta de cerdo, ajos, pimentón, aceite y sal.
En origen era comida de pastores y gente del campo, consumida sobre todo en los fríos días de invierno. Este plato se consume popularmente en un corro alrededor del "perol" o sartén que se ha utilizado para la elaboración, con una cuchara o con un simple trozo de pan "asentado" pinchado en la navaja o cuchillo y que se moja en las gachas. 
En algunos lugares, como La Mancha conquense, se acompaña también con setas o patatas cocidas o fritas . En la comarca de la Serranía de Cuenca, aunque también en la Mancha toledana y ciudadrealeña, además de en otros sitios, en época de matanza, se suele acompañar con hígado y bofes del cerdo, frito o cocido anteriormente junto con el tocino, muy picado y añadido al guiso a la vez que el agua o comiéndolo alternándolo con las propias gachas. 
Un truco que me dijo Rafa, cuando se preparaban las gachas en tiempo de matanza, era añadir un poco de sangre para oscurecer las gachas. También me dijo Mariví que, a falta de sangre, algunos le ponen unas nueces para que adquiera ese tono. 
Se suele acompañar de guindillas picantes, cebollas o pepinillos en vinagre para refrescar. 

Ingredientes ( para un regimiento)

  • 3/4 de harina de almortas
  • 3 kg de panceta
  • un buen trozo de hígado de cerdo
  • 1 cabeza de ajos
  • 3 cucharadas de pimentón
  • 3 cucharadas de alcaravea
  • 3 cucharadas de orégano
  • sal
  • aceite de oliva, mejor si es de La Alcarria, en abundancia ( Mariví se cortó un poco con el aceite por nosotros pero me dijo que no basta con un culito)



Elaboración




  1. Ponemos abundante aceite en la sartén. Se fríe el hígado de cerdo, se saca y se tritura. Se reserva.


  2. En el aceite, se añade la panceta en tiras gorditas. Cuando lleven un rato cocinándose se le añaden los ajos enteros, se deja que se dore bien todo. Se saca y reserva.


  3. Añadimos la harina al aceite. Rehogamos removiendo, como si se tratase de una bechamel, con cuidado de que no se nos queme pero lo suficiente para que luego no nos sepa a harina cruda.

 
   4. Añadimos el pimentón, orégano y alcaravea. Rehogamos y añadimos agua "a ojo" y sal, claro!!!!.




  5. Añadimos el hígado triturado y comenzamos a remover, cuidando de que no se nos pegue al fondo. No sabría decir cuanto tiempo vamos a necesitar pero calcula una media horita, puede que más. 




Mientras se van haciendo, vamos a ver que tienen "nuestros primos" en su huerto:




  6. ¿Cómo va la cosa????


Ummm...deliciosa !!!!!

  7. Y ¿Cómo sabremos cuándo están las gachas?????? Cuando veamos subir el aceite a la superficie. En este caso Mariví ha sufrido un poco porque, como ya he dicho antes, fue un poco miradita con el aceite y parecía que el aceite no subía del todo pero es que no había tanto como de costumbre.


¿Ves el aceite???



  8. Las gachas ya están!!!!!!!


Lo normal sería comerlas en la sartén. Pero con la pandemia....vamos a tener que emplatar!!!!



Lo que no podemos es dejar que se enfríen. Acompañamos con la panceta, un trozo de pan y unos encurtidos.


Da gusto tener primos pero más gusto da tener amigos !!!!!!!










No hay comentarios:

Publicar un comentario