jueves, 30 de julio de 2020

Batata y brocoli al horno con champiñón salteado y hummus


Batata y brocoli al horno con champiñón salteado y hummus


  Por fin Carlos, mi adolescente de 15 años, se ha dado cuenta de que no sólo de carne vive el hombre!!!!

Hace unos días, harto ya de tanta carne, me pidió que le hiciera "ensaladas, verduras y eso...."
Estoy buscando el modo de que siga así y buscando, buscando, me encontré con este plato en el perfil  dubaitastes de Instagram.

Pertenece a una colección de 5 platos que ha titulado " 5 delicious plant based bowls". 
Me llamó la atención este porque me encanta todo lo que lleva el plato pero la batata en particular.

Nos ha encantado la combinación de hortalizas con el hummus y un toque picante que le da mucha vida al plato.



Ingredientes


  • 1 batata
  • 1 brocoli
  • 6 champiñones
  • 1 ajo
  • 3 guindillas secas
  • sal
  • aceite de oliva virgen extra
  • pimienta
  • 2 cucharadas de hummus
  • un poco de pimentón


Elaboración


  1. Pelamos y cortamos en dados la batata. Salpimentamos y añadimos un chorro de aceite. Horneamos a 200ºC hasta que esté tierna y con un poco de color ( unos 20 minutos).



  2. Sacamos los arbolitos del brócoli y cortamos en "láminas" gruesas. Salpimentamos, añadimos un chorro de aceite y horneamos a 200º C hasta que comiencen los bordes a dorarse, unos 7-8 minutos.


  3. Limpiamos con un papel húmedo los champiñones y laminamos. Ponemos el ajo picado y 1 cayena picada en un chorrito de aceite, al fuego, hasta que comience a chisporrotear. Añadimos los champiñones y dejamos dorar. 

 

  4. Colocamos las hortalizas, sin mezclar. Añadimos el hummus en el centro. Espolvoreamos de pimentón. Añadimos las otras 2 cayenas, sin las pepitas, picadas. Regamos con un chorrito de aceite y servimos.


                                                                                                  Sano, sano, rico, rico !!!!!

lunes, 27 de julio de 2020

Sardinas marinadas y ahumadas


Sardinas marinadas y ahumadas


  Alguna vez he comprado sardinas ahumadas. Están muy ricas y no son nada baratas. Se pueden tomar de mil maneras, en aperitivo sobre una simple tostadita con tomate natural, en ensalada...

Como esta ensalada de sardina ahumada con vinagreta de naranja:


o esta de tomate emulsionado:



Creía que para hacerlas necesitaría algún artilugio de los que salen en masterchef pero he descubierto, buscando recetas, un modo casero y muy efectivo de ahumarlas. 
Sólo se necesita:
  • unas ramas secas de alguna hierba aromática, por suerte tengo romero y tomillo plantado y alguna ramita seca tenían; 
  • una plancha de pizarra, un plato o cualquier recipiente que aguante el fuego
  • y una campana o un cuenco con el que podamos cerrar herméticamente el recipiente para cubrir las ramas y el alimento a ahumar

Para ahumar las sardinas, primero tienen que haber estado congeladas a -20º C. Antes se decía que 48 horas, ahora se dice que 5 días porque los congeladores de casa no tienen suficiente potencia. Esto es para matar el posible y más que probable anisakis que infecta al pescado.





Ingredientes


  • 5 sardinas, limpias de cabeza y tripas, que habrán estado en el congelador al menos 5 días, a -20º C
  • 200 gr de sal gruesa
  • 100 gr de azúcar
  • la piel de 1 naranja ( sólo la parte coloreada)
  • la piel de 1 limón ( sólo la parte coloreada)
  • pimienta
  • 1 puntita de jengibre en polvo
  • aceite de oliva virgen extra
  • unas ramitas de romero y tomillo secas


Elaboración


  1. Descongelamos las sardinas en la nevera. Las abrimos y quitamos las espinas. Las metemos 30 minutos en agua bien fría con una cucharadita de sal, en la nevera, para que se desangren. ( es importante que el agua esté fría para que no se queden blandas). 

 

  Las secamos bien.


  2. Mezclamos la sal, el azúcar, la ralladura de naranja y limón, la pimienta y el jengibre. Ponemos una capa de esta mezcla, encima las sardinas con la piel hacia arriba y cubrimos con otra capa de la mezcla.

 

 

  3. Las cubrimos con film e introducimos en la nevera 60-70 minutos, no mucho más para que no se queden secas.

 

  4. Las limpiamos con agua y secamos bien y las introducimos en un bañito de aceite. Las dejamos otra hora en la nevera. Podemos dejarlas más tiempo.

 

Hasta aquí tendríamos un as Sardinas Marinadas que podríamos usar del mismo modo que la ahumada.




 Vamos con el ahumado:


  1. Colocamos las sardinas sin amontonarlas sobre la pizarra. Hacemos un atadillo con las hierbas secas y preparamos la campana y el encendedor.


  2. Encendemos las ramitas y cuando comiencen a arder, cubrimos con la campana. Cuando se consuma el oxigeno se apagará y soltará el humo con el aroma de las hierbas. Dejamos tapado unos minutos para que las sardinas cojan el humo.


  3. Ya tenemos nuestras sardinas ahumadas para tomar o utilizar en recetas como esta:

Sardinas ahumadas con ajo blanco





                                                                                                    Riquísima !!!!!!!


jueves, 23 de julio de 2020

Gazpacho de remolacha


Gazpacho de remolacha


  Me encanta este gazpacho, por su color y por su sabor!!! 

No tiene mucho que ver con el gazpacho andaluz. Hay muchas formas de hacerlo. Una sería añadir remolacha al andaluz. Pero yo he optado por prescindir de casi todos sus ingredientes y probando, probando me ha salido un gazpacho delicioso. 
Es un gazpacho para comer con cuchara. Y ha sido todo un acierto el crujiente del plátano.



Ingredientes ( para 2 )


Para el gazpacho
  • 300 gr de remolacha cocida
  • 170 gr de manzana verde con piel
  • 60 gr de cebolla morada
  • 70 gr de yogur griego
  • 10 gr de mayonesa
  • 10 gr de vinagre
  • 120 gr de agua helada
  • sal
  • pimienta
  • 15 gr de aceite de oliva virgen extra
Yogur 
  • 30 gr de yogur
  • unas gotas de vinagre
  • una cucharadita de aceite
  • sal
Guarnición
  • medio plátano macho
  • sal
  • aceite para freír


Elaboración


  1. Trituramos todos los ingredientes del gazpacho excepto el aceite hasta que quede todo integrado.
   2. Añadimos el aceite y batimos para que quede cremoso y ligado.


  3. Dejamos enfriar en la nevera. Mezclamos los ingredientes del yogur enérgicamente con una cucharilla.

  4. Pelamos y cortamos el plátano en rodajas muy finas, mejor con mandolina. Freímos en abundante aceite, a 140 ºC, hasta que comience a dorarse. Sacamos a un papel absorbente y añadimos una pizca de sal.

  5. Servimos la remolacha, con unas cucharaditas de la mezcla de yogur por encima y una montañita de  rodajitas de plátano. 


                                                                                                Qué rico !!!!!!!!!!!
                  

lunes, 20 de julio de 2020

Ceviche de salmón


Ceviche de salmón


Tenía unas ganas de hacer este plato!!!!
Tantas que no me he esperado ni a tener cilantro, uno de los ingredientes en el que más coinciden todos los cocineros. He improvisado mi ceviche con lo que tenía en la nevera.

He visto un montón de recetas, muy variadas. Todas tienen en común un pescado, marisco o la combinación de ambos, cortado en daditos, marinado en zumo de limón y/o lima, en algún caso también naranja ; aderezado con cebolla, normalmente morada, un poco de ají, más para dar sabor que picor, en casi todos los casos aromatizado con unas hojitas de cilantro, un toque de pimienta en muchos casos. Y, según el país, servido con guarnición de tubérculo hervido como batata, yuca; algunos granos de maíz hervido o tostado, plátano frito o alguna legumbre.

El cebiche, ceviche, sebiche o seviche (según la Real Academia Española, puede ser escrito de estas cuatro formas, dependiendo del lugar) es un plato consistente en carne marinada ―pescado, mariscos o ambos― en aliños cítricos. Diferentes versiones del cebiche forman parte de la cultura culinaria de diversos países latinoamericanos litorales del océano Pacífico, de donde es nativo, siendo estos Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá y Perú, en este último se lo considera como patrimonio cultural.

Pescados y mariscos utilizados en diversos países:  salmón, corvina, reineta, lenguado, pejerrey, caballa, bonito, mero, tollo, perico, trucha, dorada, camarón, ostra, jaiba, calamar, chipi chipi, ostras, conchas, camarones, cangrejo, langosta, langostinos...

La adición de aguacate al ceviche peruano, según un cocinero que parecía muy entendido en la materia, lo llevaron los emigrantes peruanos a la capital dónde sólo se hacía con el pescado. Fusionando la cocina del resto de Perú, dónde el ceviche no se hacía, con la limeña.

Es muy importante que el pescado y marisco haya sido previamente bien congelado, esto en las neveras de casa quiere decir un mínimo de 5 días, para evitar el anisakis.

Y dicho esto, he visto cómo uno de los considerados como el mejor ceviche del mundo, el que elabora Javier Wong en su restaurante Chez Wong de Lima, Perú; utiliza tan sólo cebolla morada que no lava para no contaminar, un toque de ají limo, un lenguado recién pescado que tampoco lava por lo mismo, sal, pimienta molle ( un tipo de pimienta rosa más dulce que picante) y abundante zumo de lima. Según él, el secreto está en la sencillez y la frescura de los ingredientes.

El tiempo de marinado es cada vez más corto, antes era de horas , actualmente de unos 15 minutos. De este modo el pescado queda más tierno, con más color y menos ácido. De hecho, en muchos restaurantes se hace al momento sin esa maceración.

El ceviche se debe servir bien frío, en algún caso he visto poner un par de cubitos de hielo al zumo para enfriar mientras se prepara.

La leche de tigre es la salsa que resulta del ceviche. Esta salsa a base de lima/ limón, el pescado y/o el marisco, la cebolla morada, el cilantro, el ají y el punto de sal; se ha ido enriqueciendo con algún otro ingrediente como el jengibre, ajo, pimienta, cilantro, fondo de pescado previamente preparado y enfriado, incluso trozos de pescado que se desechan al cortar los daditos del ceviche. Todo ello licuado y colado.
El añadir un poco de fondo de pescado al ceviche hace que la salsa resultante sea más suave restándole acidez.

La forma correcta de tomar el ceviche es con cuchara para poder apurar esa leche de tigre que le da vida al plato.

Hay en Perú tantas recetas del ceviche y su leche de tigre como familias. Partiendo de los elementos principales cada cual incorpora libremente ingredientes y productos locales. Lo importante es que salga rico. Eso exactamente  es lo que he hecho yo:


Ingredientes


  • 250 gr de salmón fresco ( congelado 5 días)
  • una docena de camarones también congelados
  • media cebolla morada
  • zumo de limón y lima 
  • 1 pimiento picante rojo
  • 1 aguacate
  • 1/4 de bulbo de hinojo 
  • unas rodajitas de rabanito
  • 1 naranja
  • cebollino
  • sal
  • pimienta
  • 1 batata 

Elaboración


  1. Lo primero será cocer la batata para que no esté muy caliente a la hora de servir. El ceviche debe estar siempre bien fresquito. 

  2. Cortamos el salmón, una vez descongelado, en daditos. Pelamos los camarones. Ponemos todo junto a macerar 15 minutos en el zumo de lima y limón, en la nevera. Debe quedar cubierto.


  2. Mientras, preparamos la cebolla que cortaremos muy fina y lavaremos bajo el chorro del grifo para quitar potencia.

  3. Quitamos las pepitas al picante y picamos. Cortamos el cebollino. Picamos el hinojo. Cortamos en daditos el aguacate. Cortamos unas rodajitas de rábanito. Cortamos la naranja a lo vivo sacando los gajos libres de albedo, de piel e incluso de la membrana que recubre cada gajo.


 

 

  4. Colamos el pescado. Añadimos el resto de ingredientes. Removemos suavemente. Salpimentamos al gusto ( Yo no le he añadido ni sal ni pimienta). Y añadimos unas cucharadas del zumo en el que hemos macerado, podemos añadirle el zumo de la naranja que hemos desechado.

  5. Servimos con la batata de guarnición, a un lado.


O aparte


                                                                                                       Riquísimo y refrescante !!!

viernes, 17 de julio de 2020

Tartar de remolacha


Tartar de remolacha

  No soy muy de steak tartar, ni tartar de atún por aquello de que, además de tener que comer la carne o pescado crudos, también hay que añadirle una yema cruda a la receta para amalgamar.

 Pero he descubierto, gracias a El Paladar de Carola a la que sigo por Instagram, un modo de hacer una receta de tartar sin necesidad de utilizar ni carne ni pescado.
Además, buscando recetas, Jordi Cruz me dio la clave de como hacer el huevo para no tener que añadirlo crudo.

He mezclado la receta de steak tartar de Jordi con la de remolacha de Los Hermanos Torres.
El resultado, un plato refrescante lleno de color con un sabor muy peculiar que en casa nos ha gustado "bastante". No para comerlo todos los días pero sí para tener un entrante más al recurrir en ocasiones especiales.

Mi remolacha era muy grandota así que me ha salido demasiado tartar y no es un plato que convenga guardarlo de un día para otro. Así que la próxima vez, un poco menos de todo. Por suerte, que exija una cantidad de gramos exacto, cada cual pone los ingredientes a su gusto dependiendo de que te guste más o menos ácido, dulce, sabrosona...

Para la base del plato, no es necesario pero da un contraste de color al plato, Jordi pone una mostaza verde a las finas hierbas. Yo, cómo no tenía, he hecho una "crema" con mostaza, mayonesa y hierbas aromáticas. Como no me parecía bastante verde, le he añadido medio aguacate.

Ingredientes


Para la crema de "mostaza" verde:

  • unos 20 gr. de hierbas aromáticas ( perejil, cebollino y albahaca frescos)
  • 1 cucharadita de mostaza de dejón
  • 1 cucharada de mayonesa
  • 1 cucharada de zumo de lima
  • medio aguacate

Para el tartar:

  • 1 remolacha cocida
  • 1 manzana ácida ( granny smith)
  • 1 chalota
  • unas cuantas alcaparras
  • unos cuantos pepinillos
  • 1 cucharada de mostaza a la antigua
  • 1 cucharada de mostaza de Dijon
  • zumo de media lima
  • aceite de oliva virgen extra
  • sal
  • pimienta recien molida
  • 1 cucharadita de salsa Perrins (opcional)
  • 1 yema de huevo


  • unas escamas de sal
  • aceite de oliva v.e
  • cebollino

  • unas rebanaditas de buen pan
  • queso parmesano, pecorino o manchego curado...
  • unas hojitas de eneldo


Elaboración


  1. Trituramos todos los ingredientes de la crema verde. Reservamos en la nevera.

 

 


  2. Cortamos en daditos mínimos la remolacha, chalota, manzana, pepinillos y alcaparras.

 

Te aconsejo que te pongas guantes de cocina desechables para manipular la remolacha.



 


 


  3. Lo colocamos todo en un cuenco y añadimos sal, pimienta, el zumo de lima, un buen chorro de aceite, las cucharadas de mostazas y la salsa Perrins.

 

  4. Ahora es el momento de añadir la yema de huevo. Podemos añadirla sin más o podemos, como yo he hecho, calentarla en un baño maría, removiendo sin parar hasta que comience a espesar. 
En cuanto notamos que comienza a espesar la pasamos a un baño de hielo o la añadimos, sin perder un segundo, al cuenco y removemos todo con mimo hasta que quede todo bien amalgamado.

 


  5. Todo este proceso ( pasos del 2 al 5) se puede hacer en un baño María invertido, es decir, con el cuenco introducido en otro cuenco mayor, con agua y mucho hielo para que, mientras hacemos la receta, se vaya enfriando. Esto lo haremos si la vamos a consumir inmediatamente. Si no es así, la introduciremos en la nevera y todo cogerá más sabor.

  6. Hacemos unas rebanaditas de pan, añadimos un poco de eneldo y queso rallado. Gratinamos hasta que esté dorado.


  7. Para servir, ponemos en la base del plato un brochazo de crema verde. Emplatamos el tartar con un aro sin apretar mucho. Acabamos con cebollino, escamas de sal y un chorrito de aceite.
Acompañamos con el pan. 




                                                                                                                  Color !!!!!!!!