Galletitas de plátano y avena

Galletitas de plátano y avena

  He descubierto un modo, muy saludable, de aprovechar los plátanos o bananas que se nos ponen negros en la nevera y sin embargo siguen estando de lo más sanos por dentro. Es verdad que nunca los tiro porque siempre se le pueden añadir, fritos, al arroz a la cubana o hacer algún pan de plátano... pero está muy bien tener más opciones.

La opción de las galletitas es muy sencilla, rápida y saludable. Se hacen en 5 minutos, el resto lo hace el horno.

No esperes encontrarte unas galletas crujientes, son más bien como unos bollitos con textura de pan de un día pero que te dejan un saborcito tan rico que tienes que inmediatamente ir a por otra.
Lo mejor es que no necesitan azúcar, ni huevos, ni mantequilla, ni harina...con el plátano y la avena es suficiente.

Luego, con un poco de imaginación, puedes ir variando su textura y sabor añadiendo: canela, vainilla, coco, almendras, nueces, chía, arándanos secos, pasas, higos secos, dátiles, ajonjoli...

Son una opción sanísima para tomar algo dulce en el desayuno, la merienda o cuando nos llega el "antojo". 

El plátano es una fuente de minerales como el potasio, el magnesio; vitaminas A, B y C; tiene antioxidantes y es muy saciante . 

La avena ayuda a regular los niveles de colesterol, es una buena fuente de fibra, su contenido en hidratos de carbono proporciona mayor sensación de saciedad después de comer y facilita la digestión.

En cuanto a la conservación: si te las vas a comer en dos días, las puedes meter en una lata como cualquier galleta. Si vas a tardar más, tendrás que conservarlas en la nevera.

Ingredientes

• 3 plátanos maduros
• 150 gr de copos de avena
• 25 gr de coco rallado
• canela molida

Elaboración

  1. Chafamos los plátanos con un tenedor. Añadimos la canela y vamos añadiendo la avena, dependiendo del tamaño y la maduración de los plátanos necesitaremos más o menos cantidad. Deben queda una masa manejable para formar unas bolitas. 

 

  2. Añadimos el coco rallado, mezclamos muy bien y vamos cogiendo porciones con dos cucharitas para que no sean muy grandes. Las vamos depositando sobre papel de hornear.

 

  3. Chafamos un poquito y redondeamos para que nos queden más o menos regulares.

 

  4. Horneamos a 180º C. Unos 20 minutos para que queden bien doradas por el exterior. Dejamos enfriar sobre rejilla y guardamos en una caja bien cerrada.

                                                                                                  Sanas, sanas, y bastante ricas!!!!!!